En este post hablaremos sobre uno de los temas más de moda en el comercio internacional y la gestión de aduanas, hablamos del depósito o almacén fiscal. Un tipo de almacén que puede ayudar a tu empresa a reducir costes y tiempos de entrega.
Te contamos todo lo que debes saber acerca de este modelo en nuestro post...
¿Qué es un Almacén fiscal?
Un depósito o almacén fiscal es un regimen aduanero que facilita a los expertos de comercio exterior, asegurar una mercancía que proviene mayoritariamente del mercado exterior hasta concretarse el destino final de dichos productos.
La ubicación de un almacén fiscal varía mucho, pudiendo econtrarse cerca de puertos, fronteras o aeropuestos, sin embargo en todas las circunstancias deberá estar supervisado por un Agente Aduanero. Dichos almacenes tienen una catecterística que los hace distintos y es que son gestionados por un partícular que ha conseguido los trámites necesarios para actuar bajo el marco legal.
Dentro de los movimientos (estatus) de la mercancía es posible encontrar:
- Ingreso de la mercancía, que abarca: fecha, peso y cantidad.
- Movimiento o estatus que se tiene: ingreso a aduana, entrada y salida de revisión aduanal, en tránsito al destino final, etcétera.
- Despachos totales o parciales.
- Inventarios.
Un depósito o almacén fiscal es el lugar en donde una empresa guarda una mercancía a la espera de una negociación. Dicha mercancía puede ser nacional o extranjera y exportarse hacia otros paises. Son las agencias aduaneros quienes regulan estas transacciones apoyándose en la Ley General de Organizaciones y Actividades Auxiliares del Crédito. Algunos de los beneficios del depósito fiscal son:
- Hasta su extracción, la mercancía importada no requiere de pagos a las contribuciones del comercio exterior.
- Permite retirar parcial o totalmente la mercancía asegurada.
- Facilita el comercio para proveedores extranjeros que pueden derivar su inventario hacia estos almacenes para comercializarlo en territorio nacional.
- Siempre que exista un contrato, la empresa puede aprovecharse de las ventajas de este tipo de depósitos.
- Por otro lado, la reducción de costes en cuanto al transporte son representativos.
¿Cuándo se puede retirar una mercancía de un almacén fiscal?
Las mercancías depositadas en los almacenes fiscales puedan retirarse:
- Devolverse al extranjero o reincorporarse al mercado las de origen nacional, cuando los adjudicatarios renuncien del régimen, no resulte posible su entrega o se halle alguna anomalía legal en exactamente las mismas.
- Importarse claramente, si su procedencia es extranjera.
- Importarse provisionalmente por empresas con programas IMMEX.
- Exportarse claramente, si se trata de mercadería de procedencia nacional.
¿Existen mercancías que no puedan estar en almacenes fiscales?
La contestación simple y rápida es sí. Algunas de las mercancías que no pueden estar presentes en un depósito fiscal son:
- Armas y municiones.
- Mercaderías explosivas, radiactivas, nucleares o que tengan algún agente contaminante.
- Artículos de jade, marfil, coral y ámbar.
- Ciertos automóviles.
- Relojes.
- Predecesores químicos y químicos esenciales.
- Cigarrillos.
- Diamantes, refulgentes, rubíes, zafiros, esmeraldas y perlas naturales, cultivadas o manufacturadas con metales bellos.
- Aceites minerales puros de petróleo, fuelóleo o gasolina.
No obstante, si su empresa cuenta con las autorizaciones precisas, cumpliendo con las regulaciones establecidas en el marco legal, va a poder efectuar sin incidentes la exportación e importación de las mercaderías previamente mentadas.
¿Cuál es el destino de las mercancías depositadas en almacenes fiscales?
Una vez concluida la estancia en guardes fiscales, las mercaderías podrán:
- Regresarse al extranjero o reincorporarse al mercado las de origen nacional, cuando los adjudicatarios se renuncien de este régimen, no resulte posible efectuar la entrega de la mercadería, o, que se infrinja con el marco legal, impidiendo con esto su importación o exportación.
- Importarse claramente, si se trata de mercaderías con procedencia extranjera.
- Importarse provisionalmente por empresas con programas IMMEX.
- Exportarse claramente, si las mercaderías son de procedencia nacional.
Otras modalidades de depósito fiscal
De manera general podemos decir que el resto de ejemplos o modalidades de almacén fiscal son:
Duty free. Se trata de locales de exposición y venta de mercaderías nacionales y extranjeras establecidos en los puertos aéreos, fronterizos y marítimos, en los que las mercaderías no se hallan sostienes al pago de impuestos de comercio exterior, toda vez que sean destinados para la venta exclusiva a pasajeros que salgan del país y dichas mercaderías sean entregadas en los puntos de partida del mismo. Entre estas mercaderías es posible incluir:
- Muestras y muestrarios.
- Relojes.
- Artículos de joyería fabricados con diamantes, perlas naturales o cultivadas, esmeraldas, refulgentes y zafiros.
Una de los beneficios de este régimen es que deja la destrucción de mercadería dañada, obsoleta, caduca o inservible, eludiendo con esto el hurto de inventarios.
Industria Automotriz. Esta modalidad está enfocada a las compañías dedicadas a la fabricación y ensamblaje de automóviles, para la importación y exportación de piezas y materiales concretos.
Centros de Exposiciones Internacionales. Se habilitan locales para percibir una exposición de un inventario temporal, de forma promocional, el que puede estar destinado para una siguiente venta.
Te has quedado con las ganas de aprender más sobre los depósitos aduanales y sobre importaciones de productos extranjeros, te recomendamos que veas nuestro artículo sobre cómo importar de china y nuestra selección de cursos para importadores.